jueves, 11 de agosto de 2011

Valladolid (México)

Nunca hubiera dicho que una población de 45000 habitantes me daría uno de los momentos más especiales de todo el viaje.
De Chichén Itzá fuimos a Valladolid. Nos paramos a tomar una cerveza en un pueblecito y me compré una hamaca no muy cara con un poco de regateo. Nos sentamos junto a un árbol de algo que para mi eran mangos y para Walter eran manglobas (no he encontrado el término en internet, así que no sé si se dirá así sólo en su región)
Mapa de las calles de Valladolid.


Llegamos a Valladolid. La ciudad tiene casas de color pastel con paredes que parecen enyesadas, como si fueran un pueblo blanco andaluz. Por primera vez me llamó la atención que todos los contadores de la luz estaban en el exterior de las casas ya que contrastaban mucho con la armonía de formas. Luego me explicaron que hay una ley que les obligaba a tenerlos fuera. Lugar tranquilo por el que merece la pena pasear con sosiego entre sus calles de espíritu colonial.
Perdí parte de mi tiempo en buscar un teléfono para llamar al aeropuerto y preguntar por mi maleta. En principio volaría desde Cancún a Mérida al día siguiente y allá nos encontraríamos. En una tienda de telas me compré metro y medio de tela de toalla por aquello de tener algo para secarme y no nos dio tiempo de mucho más. Cogimos el coche y de vuelta a Chichén Itzá para el espectáculo nocturno.
Sin duda, si se puede, recomiendo la visita al espectáculo nocturno. Me repito pero no me extiendo.

A la vuelta cenamos y nos metimos en un bar a tomar unas micheladas. Aquí es donde mi paladar recibió el primer zambombazo serio de mexicanidad. Le pedí al camarero la receta para que lo veáis:
Michelada: Cerveza, hielo, salsa maggi, salsa inglesa, Salsa de soja, salsa picante, sal y limón.
Luego en la carta había Cheladas y Chamoy Michelada
Chamoy Michelada: Cerveza, limón exprimido, salsa maggi, salsa inglesa, salsa tabasco, pimienta molida, hielo.

Walter se arrancó a charlar con 2 chicas que estaban en una mesa contigua. Gracias a él, que yo no tenía muchas ganas después de tantas horas conducidas. La charla estuvo muy interesante, especialmente con una veterinaria que había dejado su puesto en la capital para venir a ejercer en la jungla. Empezamos a hablar de las medicinas alternativas y de todo lo que ella estaba aprendiendo de los lugareños. Su acompañante, maya de nacimiento, nos contó cosas sobre la cultura maya si bien admitía que ella, o su generación en general, está perdiendo la costumbre de hablar maya pero que su abuela casi no sabe hablar otra cosa. Walter no estuvo muy lucido al defender la medicina farmacéutica, pero bueno, no se lo echaremos en cara. Con mi veterinaria favorita desarrollamos los conceptos filosóficos y matemáticos que ambos sabíamos sobre los mayas. Me sentí muy a gusto y confié en vano en que usaran el correo electrónico que les dejé.

Valladolid tiene su encanto por dentro y cosas para ver por fuera.

La mañana siguiente yo hubiera salido a las 7 de la mañana hacia Ek Balam pero tenía un compañero de viaje no tan madrugador. Salí a la puerta y, ante mi sorpresa, el cuidador del albergue "La Candelaria" es holandés, así que estuvimos hablando holandés. Teniendo en cuenta que unas horas antes había hablado con una alemana y durante el desayuno con una pareja francesa fue como mi dia de las lenguas. Mientras esperaba, en la esplanada de la iglesia de la Candelaria, me enseñaron a contar en maya, pero sólo gráficamente.

El albergue me resultó muy agradable, con su terraza interna y su ambientación local. Las literas eran cómodas y las habitaciones amplias en las que duermes con varias personas. Puedes guardar las cosas en un armario por lo que llevar un candado es útil. Yo llevaba tan pocas cosas que podía llevar todo encima; era mi cuarto día sin maleta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quizás el tener los contadores fuera de las casas es una forma de controlar que no alteren el consumo de energía..como lo hacen en muchos países de Latinoamérica. Tan raro que tu paladar haya recibido el primer toque de mexicanidad con la cerveza..jajajaja. Excelente viaje te felicito!