sábado, 1 de noviembre de 2008

Mi odisea para ser ciudadano de Amberes (III)

La semana pasada me llegó una carta. Esta rezaba algo parecido a que mi tarjeta estaba esperándome en el Ayuntamiento durante varias semanas. ¿Acaso no había intentado ir a buscarla y me lo había denegado? Me decía que me presentara con el recibo del pago, mi antigua documentación, el pin-puk recibido y dicha carta.
Debí esperar otra semana debido a dos cosas: primera los turnos de trabajo que hacían que los horarios fueran bastante ajustados como para llegar a tiempo al Ayuntamiento, y la segunda que los autobuses llegaron esa semana todos los días con unos 20 a 30 minutos de retraso, lo cual hacía inviable llegar a tiempo.

El jueves de esta semana fui directamente del trabajo al Ayuntamiento. Una fila terrible que esta vez no tuve que soportar porque ya sabía que hay otra ventanilla menos poblada para estos menesteres. Me dieron un número, esperé unos 5 minutos, me llamaron. Esta vez la mujer me dijo las cosas en holandés pero se esforzó por hablar lento y yo le respondí también en holandés. Rellenamos el código pin y puk en los lugares adecuados y, sin pedir ningún formulario número 8 (será porque no hacía falta) por fin recibí mi tarjeta de residente belga. POR FIN DEJO DE SER UN IRREGULAR.
Es un bonito carnet verde, tamaño tarjeta de crédito y con un holograma de mi cara y mi foto en blanco y negro.

Ahora me planteo cambiar mi carnet de conducir porque aquí no caduca, cosa que en España sí. Es un simple papeleo burocrático. ¿Lo haríais?

1 comentario:

Josel3 dijo...

Enhorabuena por la ciudadanía! Cuesta, pero siempre nos costará a nosotros mucho menos por ser aspañolitos de bien y por consiguiente europeos...
El tema del permiso de conducir es tentador... habrá que informarse :D